Podría decirlo cada vez, pero es la verdad, cada tarta de boda es única y refleja el sentir y la personalidad de la pareja.
En este caso, la pareja celebra su boda y el bautizo de su pequeña, por lo que querían que su tarta reflejara la familia entera.
Es una pareja joven y divertida, por lo que no querían algo extremadamente señorial y clásico, querían algo sencillo, que se pareciera a ellos, y muy importante, tenía que aparecer en la decoración: el árbol de la vida y la pequeña.
Así que hablando del diseño llegamos a esta decoración, una tarta semi naked con frutas de temporada.
La tarta compuesta por un bizcocho de vainilla de Madagascar y un relleno de buttercream de limón, que fuera fresquita, por fuera muy silvestre, paniculata, crisantemos verdes, unas fresas rojitas, y el topper con el árbol de la vida, la parea de recién casados y la pequeña, hecho en tonos madera.
Sabemos de primera mano que a los novios le encantó su tarta.
Si quieres una tarta personalizada para tu boda, no dudes en consultarnos.